Año Jubilar de la Misericordia

18 de abril de 2013

Escuela de Catequistas de Pontedeume

Un sábado más convocados entusiastamente por D. José Ramón Cascón, párroco, se reunió la comunidad de Santiago Apóstol de Pontedeume y de Franza.

Comenzamos nuestro encuentro, sintiéndonos Iglesia misionera, D. José Ramón dio lectura a un correo enviado por Sor Lourdes Mallo (antigua feligresa de esta Parroquia) en la que le relataba la celebración de la Semana Santa en una pequeña población de Burkina Faso, destacando que en la Vigilia Pascual había recibido el bautismo ¡456! Nuevos cristianos y el Domingo 126. Una explosión de esperanza para la Iglesia.

Después oramos centrados en el testimonio de Jesús resucitado que dieron los primeros discípulos y cómo fue el Espíritu Santo el motor y animador de la primera evangelización, moviendo a los apóstoles a superar sus dudas, recelos y sobre todo sus miedos.

Nuestra exposición se centro en el testimonio, analizamos los rasgos que debe tener una comunidad cristiana para ser testigo de Jesús y cómo cada uno de nosotros tiene la responsabilidad de transmitir aquello que ha “visto y oído”, un tarea que no es fácil, que tiene que vencer la inercia y pretendida imposición de la “privacidad” de parte de la sociedad.

Con el canto de Resucitó, terminamos esta parte de nuestro encuentro que se prologó alrededor del café y el bizcocho, tan cariñosamente preparado por la comunidad acogedora de Pontedeume, en este momento intercambiamos ideas sobre las dificultades en la acción catequética, los primeros pasos del Papa Francisco, la presencia de la Religión en la Escuela y la celebración de la Pascua en nuestras parroquias.

El día 25 continuaremos nuestra formación, hasta entonces dejémonos guiar por el Espíritu para hacer presente a Jesús resucitado.
Escuela de Catequistas de Pontedeume